SAN PEDRO DE MACORIS:--En medio de
llantos, dolor y suspiros fueron sepultados en la mañana de este miércoles los
restos del joven Miguel Méndez Figueroa,
de 25 años, (Limpiavidrios) quien fue ultimado por un hombre, en un
incidente ocurrido en la intersección de la avenida Winston Churchill con
Sarasota en Santo Domingo el pasado sábado.
El cotejo fúnebre del joven ultimado partió desde la
funeraria municipal de esta ciudad ubicada en la avenida Independencia de aquí
y la muestra de dolor de amigos y familiares era notoria.
“A ese niño lo crié yo desde que tenia seis años
cuando me junte a con su abuela y la crianza que les dimos fue de una personas
amable y respetuosa, lo único es que no quiso adatarse a las restricciones y se
fue de la casa y aunque siempre lo buscamos para que estuviera en las calles,
pero como quiera se nos perdía” explico Nelson Mendoza abuelo de crianza del
limpiavidrios.
El joven muerto habría tomado las calles desde los 16
años y aunque nunca se vio envuelto en asuntos delictivos sus familiares muchas
veces no sabían de su paradero.
Miguel Méndez Figueroa era el mayor de cinco hermanos
de los cuales dos residen en Estados Unidos y otros dos residen en el país y residía en la
Manzana M número 5 de la Villa Olímpica.
El mismo era vecino de la doctora Altagracia Hernández (Tati),
funcionaria de la
Junta Municipal Electoral, quien en medio de llantos decía
que lo habría ayudado a obtener su cedula y que lucho bastante para que este
estudiara sin embargo después de su deserción nunca quiso volver a la escuela.
Era
hijo de la señora Aguedita Figueroa, quien murió envenenada hace alrededor de
20 años en el Barrio Las Flores y del señor Elvin Manuel Méndez, quien
pertenece a la
Iglesia Tabernáculo Evangelístico de la Villa Olímpica y
quien viaja constantemente a Estados Unidos
Quienes
le conocieron expresaron que éste vivía prácticamente solo, aunque estaba al
cuidado de su abuela Flor María Paredes y de su tía Rosario Padua Paredes y un
tiempo bajo la tutela de Nelson Mendoza, el mismo deambulaba mucho por las
calles.
Dijeron
que frecuentemente el joven viajaba a la capital donde limpiaba vidrios y se
quedaba varios días en un lugar ignorado por sus familiares.
El
17 de Noviembre de este año cumpliría 26 años, pero fue ultimado de un disparo
por un hombre identificado por la policía como Jhonnattan Onel Báez Guzmán,
quien le disparó a la cabeza el pasado sábado en la avenida Winston Churchill con Sarasota en Santo Domingo.
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