Por: Miguel Natera.
Quisqueya:--La Fundación Don Laito Polanco del municipio Quisqueya y la Federación Nacional de Comerciantes realizaron el pasado fin de semana una charla sobre la necesidad de poner a producir las tierras del desaparecido central azucarero.
La charla se desarrollo en los salones de Disco Terraza El Almendro de ese municipio y contó con la presencia de representantes de varias entidades.
La charla fue dictada por el licenciado Cesar Heredia, presidente de UNAZUCAR, quien resalto la importancia de poner a producir las tierras del ingenio de esa comunidad.
Lamento que el gobierno no haya fomentado la producción de caña en los centrales que han sido cerrados debido a que por la falta de caña algunas de las empresas que han arrendado los centrales existentes no cuenten con la suficiente cañas para su producción.
En la actividad expusieron además Ricardo Rosario presidente de FENACER, Mariano Rosario, Rafael Parra, Ingeniero Payano, entre otros.
Además se formo un comité de seguimiento para la próxima actividad que se desarrollará en el municipio Quisqueya en los próximos días.
A continuación un extracto integro del material que se distribuyó en la charla.
Santo Domingo, D. N.
27 de Marzo 2008.-
NOTAS A LA MEMORIA DE UN INGENIO
Hace años ya que sus trenes de caña e ingenio no pitan, los ciclones humanos y atmosféricos se han encargado de ello. Antes del huracán George el ciclón de la politiquería hizo estragos del ingenio Quisqueya, fuente de vida par miles de pobladores de este municipio y comunidades circundantes. Y posteriormente a este, necrófagos devoraron los activos muebles e inmuebles de un cadavérico ingenio que una importante población observó sepultar.
Así fue, las maquinarias y equipos fueron a parar a otros ingenios arrendados en conjunto por una empresa mexicana, que confundió las comunidades de la zona este del país con las aldeas del suyo, en donde como amo y señores explotan a su antojo a bastas comunidades indígenas que están integradas al las labores del campo.
El resto de estos equipos y maquinarias, junto a las infraestructuras de transporte y naves industriales fueron vendidas como chatarras por las huestes de políticos que se han sucedido en los últimos gobiernos. Lo mismo han hecho con sus tierras, las cuales han sido distribuidas sin ningún control y los campos cañeros desatendidos, quedando hoy escuálidos palos de caña enmarañados entre pajonales, como recuerdo de lo que fueron amplios cañaverales para la producción de azúcar y melaza.
De aquel ingenio con mas de 100 mil tareas de su propiedad y mas de 60 mil tareas de colonos, con capacidad de moler 500 mil toneladas de caña al año, producir mas de 50 mil toneladas de azúcar y mas de 3 millones de galones de melaza, y que generaba empleos y divisas al país solo quedan ruinas, fue totalmente canibalizado.
Se ha esfumado el olor a melaza, no hay cachipas y de su chimenea ya humo no sale. Está ahí inerte pero erecta como solemne monumento a la incapacidad del Estado, que no supo mediante mecanismos viables y sostenibles mantener la propiedad del pueblo dominicano.
Hoy buenas nuevas avivan las esperanzas, el presidente de nuestro país hace más de un año habló de un interesante proyecto en el cual las tierras del ingenio Quisqueya iban a ser integradas con los ingenios Porvenir y Consuelo para producir etanol, energía y azúcar.
En efecto, la iniciativa privada diseño un proyecto en donde a partir de la integración de los ingenios Consuelo, Porvenir y Quisqueya, se han de producir unos 50,000,000 de galones de etanol, 70 megavatios de energía eléctrica y 100 mil toneladas de azúcar.
Aun hoy las negociaciones para el traspaso de estos ingenios no se han concentrado y hasta pareciera que la motivación en el señor presidente no es la misma, a decir por sus expresiones mas recientes, en ocasión de la apertura de los trabajos para la instalación de una planta
procesadora de alcohol pertenecientes a la empresa de Alcoholes Finos Dominicano, en donde asevero que “ tal vez este no sea el momento mas adecuado para entrar en una producción de etanol cuando hay una baja en los precios se los combustibles fósiles a nivel internacional “.
Mantenemos la esperanza del proyecto y esperamos que no sea una frase lapidaria la del presidente Fernández y que esta sepulte las aspiraciones de los hombres y mujeres que buscan una mejor vida, pues el indicado proyecto representa la inversión de más de 500 millones de dólares y la generación de más de 50 mil empleos.
Lo cierto es que la aptitud de los funcionarios encargados por el gobierno para echar adelante el plan no ha sido positiva. Se llego a un acuerdo para resarcir a la empresa Etanol Dominicano, arrendaratia actual de los ingenios Consuelo y Quisqueya, y hasta el momento no se le ha retribuido cantidad alguna del dinero acordado para desinteresar a esta empresa y permitir el contrato de arrendamiento con otra empresa interesada, desencadenando el dilema de ni uno sale ni el otro entra, en tanto miles de personas sin empleo observan la incapacidad del gobierno para poner en manos del capital y la gestión experimentada los ingenios de San Pedro de Macorís.
Hay que insistir y resistir en el intento para desarrollar planes de la naturaleza que nos ocupa, pues nunca es mas propicia la ocasión para que los países dependientes de combustibles a partir del petróleo hagan sus inversiones en planes de contingencia al alza de este.
El petróleo recurso no renovable y sujeto a las especulaciones de productores y empresas intermediarias no garantiza a futuro estabilidad en suministro y precio de mercado en términos competitivos.
Se requiere entonces, de un consciente ejercicio de inversión proactivo y no de la rezagada reacción a las que nos tienen acostumbrados los gobiernos frente a la crisis, y mas aun, cuando a pesar de la situación las finanzas en la economía mundial, hay países y entidades internacionales de financiamiento en condiciones de apoyar la inversión en proyectos para la producción de energía y biocombustible a partir de recursos renovables.
Es de ahí, que entendemos que el desarrollo de proyectos de inversión en los ingenios del este deben ser reclamados y defendidos por la comunidad organizada de esta región, es por eso que exhortamos a que todo trabajador, todo profesional o productor de caña, toda ama de casa, y todo empresario o comerciante debe en cada comunidad de esta municipio demandar la inversión en proyectos a partir de uso de las tierras del ingenio Quisqueya.
No es posible que las negligencia estatal detenga un proyecto que plantea la inversión de 500 millones de dólares, para producir 500 millones de galones de etanol, 70 megavatios de energía y 100 mil toneladas de azúcar, y que ha de garantizar el ahorro e ingresos de divisas y la generación de empleos directo e indirectos en una cantidad que ha de superar las 50 mil personas empleadas.
Demandemos el uso de estas tierras.
César Heredia
Presidente.
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